El PP pide al tripartito que impida en la Básilica otra “desgracia” como el expolio de la Villa Romana Baldomero León pide medidas para evitar el acceso de personas y vehículos a las inmediaciones del camposanto visigodo ;Exige explicaciones a Bernal y al teniente alcalde de San Pedro y Concejal de Cultura, Rafael Piña ;Asegura que no se puede construir un merendero en la zona aledaña al yacimiento ;"Estamos hablando de un bien de 2000 años de Historia y no podemos andarnos con tonterías", señalaBaldomero León pide medidas para evitar el acceso de personas y vehículos a las inmediaciones del camposanto visigodo ;Exige explicaciones a Bernal y al teniente alcalde de San Pedro y Concejal de Cultura, Rafael Piña ;Asegura que no se puede construir un merendero en la zona aledaña al yacimiento ;"Estamos hablando de un bien de 2000 años de Historia y no podemos andarnos con tonterías", señala

El concejal del PP Baldomero León muestra en un mapa el enclave de la Basílica Paleocristiana de San Pedro. FOTO// marbellaconfidencial.es

El concejal del PP Baldomero León muestra en un mapa el lugar en el que se encuentra la Basílica Paleocristiana. FOTO// marbellaconfidencial.es

El concejal del PP Baldomero Léon ha instado este viernes al equipo de gobierno a que adopte medidas para evitar que en la Basílica Paleocristiana de Vega del Mar, en San Pedro, se repita “la misma desgracia” que el expolio, a principios de 2016, del mosaico de la Medusa de la Villa Romana de Río Verde, próxima a Puerto Banús. Ambos vestigios, el primero del siglo VI y el segundo del I, forman parte de la riqueza patrimonial del municipio. “Ya hemos sufrido una consecuencia con la Medusa. ¿Vamos a permitir otra vez esta historia?”, ha lamentado.

El PP entra así en la polémica sobre las consecuencias que han podido tener sobre el camposanto visigodo los movimientos de tierra que ha realizado una máquina excavadora para construir un merendero en una parcela aledaña.

El concejal ha instado al equipo de gobierno a que precinte la zona de forma inmediata para impedir el acceso de personas después de que algunos vecinos, ha indicado León, hayan asegurado haber visto a individuos en la zona con detectores de metales. También ha pedido que se arreglen las partes del vallado a través de las cuales se puede acceder al yacimiento, que no se permita el paso de vehículos, incluidos los del Ayuntamiento, y que se amplíe el nivel de protección del recinto hasta la orilla de la playa de Lindavista.

León, que ha destacado las críticas que han vertido las diferentes asociaciones culturales sobre los movimientos de tierra, ha exigido explicaciones públicas al alcalde, José Bernal, licenciado en Historia, y al teniente alcalde de San Pedro y concejal de Cultura, Rafael Piña. “Tendrían que salir y decir algo. Alguna explicación tendrán que dar”, ha indicado.

Un patrimonio de casi 20 siglos de antigüedad

El concejal ha asegurado que no se puede construir un merendero en la zona anexa a la Basílica ni introducir canalizaciones en el subsuelo ya que “a escasamente 50 centímetros del suelo” se encuentra el yacimiento. “Qué merendero y qué conducciones. Allí no se puede meter absolutamente nada. Y lo que se haga tiene que ser en presencia de un técnico. Estamos jugando de un patrimonio de casi 2000 años de Historia. Este bien es único en España y no podemos andar con tonterías”, ha criticado.

El edil ha asegurado que su formación solicitará al Ayuntamiento todos los expedientes relacionados con el proyecto del merendero y ha dejado abierta la posibilidad de que el PP recurra a los tribunales. “Cuando tengamos toda la información comunicaremos cuál es nuestra postura con relación a este asunto”, ha señalado.

Los primeros cimientos de la Basílica datan del último tercio del siglo IV y fueron construidos junto a la Vía Heraclea. Posteriormente fue reconstruida durante el periodo visigodo y reformada al estilo de las iglesias norteafricanas. La Basílica fue declarada monumento histórico-artístico e incorporada al Tesoro Artístico Nacional a mediados de 1931. En 1983, la Junta de Andalucía reconoció al yacimiento como un Bien de Interés Cultural y en 1986 se le concedió la calificación tipo 1, que le confería la máxima protección posible. Años más tarde, el Gobierno regional impidió al GIL construir un paseo marítimo en la zona.

 

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