El Ayuntamiento de Marbella dispondrá en octubre de la e-administración y el portal del empleado, la tecnología necesaria para que el personal municipal pueda acogerse al teletrabajo, según el concejal de Innovación y Administración Electrónica, Baldomero León.
En declaraciones a Europa Press, el edil ha expresado su confianza en que en 2018 se puedan realizar las primeras pruebas en algunos de los departamentos municipales cuyas funciones permitan a sus empleados acogerse a este sistema laboral.
León ha asegurado que es un “firme defensor del teletrabajo por muchos motivos, entre ellos que permite conciliar la vida laboral con la personal y familiar”, pero ha destacado la “complejidad” de poner en marcha la infraestructura en un Ayuntamiento que cuenta con una plantilla de unos 3.500 empleados.
La implantación del sistema requerirá aprobar acuerdos en junta de gobierno y en pleno e introducir modificaciones tecnológicas, como los equipos con los que trabajarán los empleados municipales desde sus casas o mecanismos para controlar o justificar las labores que se realizan desde los domicilios.
León ha señalado que trabajadores municipales se han acogido a alternativas que permiten compaginar la vida laboral y doméstica, aunque, ha señalado, no son fórmulas “regladas” como el teletrabajo. “El teletrabajo no se trata de que te lleves el trabajo a casa, como en el Ayuntamiento nos lo estamos llevando, para hacerlo a través de conexiones a programas informáticos”, ha señalado el edil, que ha destacado que este sistema “no es para eliminar puestos de empleo, sino para facilitarlo y permitir la flexibilidad laboral y es una fórmula a la que nos dirigimos de forma irrevocable”.
El Ayuntamiento del municipio malagueño de Estepona tiene previsto iniciar este lunes un proyecto piloto para probar el teletrabajo entre sus empleados. La medida se pondrá a prueba durante un mes entre los empleados de los departamentos de Contratación y Asesoría Jurídica que se presten de forma voluntaria y cuyas funciones no impliquen necesariamente la prestación de servicios presenciales.
Los empleados trabajarán tres días a la semana de acuerdo con la jornada y horario habituales y los otros dos, desde sus domicilios. Durante la prestación del servicio en el domicilio se establece un periodo mínimo de interconexión para la realización del trabajo que coincidirá con la franja horaria de 10 a 14 horas. El control de la cantidad y la calidad del trabajo se realizará atendiendo al cumplimiento de objetivos y a la consecución de resultados.
Una vez que haya concluido el mes de esta prueba piloto, se realizará una evaluación final para comprobar el impacto del sistema en el trabajo del empleado y en el de la unidad a la que se encuentre adscrito.