IU considera a Muñoz “responsable política” del ‘caso Funky Buddha’ El lujoso club de playa abrió sus puertas sin licencia; El concejal de Urbanismo, Pablo Moro, declarará en breve como imputado por no parar la obra; Miguel Díaz reprocha a la alcaldesa que su mandato se vea salpicado de escándalosEl lujoso club de playa abrió sus puertas sin licencia; El concejal de Urbanismo, Pablo Moro, declarará en breve como imputado por no parar la obra; Miguel Díaz reprocha a la alcaldesa que su mandato se vea salpicado de escándalos

Imagen de la discoteca playera Funky Buddha

Imagen de la discoteca playera Funky Buddha

El candidato de Izquierda Unida (IU) a la Alcaldía de Marbella, Miguel Díaz, considera a la alcaldesa, Ángeles Muñoz, “responsable política” del último escándalo que salpica al equipo de gobierno del PP, conocido como ‘caso Funky Buddha Beach’. Así se llama el lujoso club de playa por el que el edil de Urbanismo, Pablo Moro, tendrá que declarar como imputado, al no haber ordenado la paralización de las obras, según la denuncia enviada por Fiscalía al Juzgado de Instrucción 1 de la ciudad.

Díaz, pide “responsabilidades políticas” ante la “flagrante” evidencia de que dicho establecimiento, ubicado en la playa de El Pinillo, haya estado ejerciendo la actividad a pesar de no contar con licencia de apertura y no cumplir con la legalidad urbanística del PGOU.

El concejal y coordinador local de la federación de izquierdas, recuerda que su formación ya mostró preocupación en el momento de la apertura de este local de playa, “ante la gravedad de la situación”, e instó al Ayuntamiento de Marbella para que adoptara “todas las medidas a su alcance”. IU subraya que actuó así para que se respetara la legalidad urbanística “y no se permitiera la apertura de ningún establecimiento de estas características sin las oportunas licencias”, recalca Díaz.

Lo cierto es que el local, situado en el antiguo Funny Beach, ha estado abierto durante todo el verano “sin licencia” y lo que se está tramitando es una licencia para restaurante con capacidad para 11 personas, “cuando la realidad demuestra que es un club discoteca de playa que ha acogido a cientos de personas”, denuncia el alcaldable.

El que fuera vocal de la Comisión Gestora, tras la disolución del Consistorio en 2006 a raíz de la llamada ‘operación Malaya’, considera que la acción de gobierno de Ángeles Muñoz “está viéndose salpicada por una sucesión de escándalos e imputaciones que demuestran que el PP no aporta un futuro de bienestar para Marbella, es más nos retrotrae al pasado gilista de inseguridad jurídica y escándalos”. Es lo que IU ha denominado “neogilismo”, término acuñado por el también concejal Enrique Monterroso en su día.

Numerosos informes instaron la paralización de obras

El Departamento de Inspección Urbanística de Ayuntamiento de Marbella ha emitido varios decretos y numerosos informes de paralización de las obras ejecutadas sin licencia en una zona calificada en el actual PGOU como Parque Litoral, incluido en el Sistema General Playa del Pinillo-Río Real, conocida como Funny Beach, un suelo no urbanizable  de especial protección como zona de servidumbre  de protección del dominio público marítimo terrestre.

A pesar de dichos informes reiterando el incumplimiento de los decretos de paralización, “en ningún momento Urbanismo adoptó la decisión que contempla la Ley de ordenar el precinto y la consecuente paralización de la actividad de ocio y restauración que ha estado abierta al público en pleno rendimiento durante todo el verano”, lamenta Díaz.

A Izquierda Unida también  le consta que el Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil ha practicado diligencias para comprobar la “ilegalidad” de las actuaciones llevadas a cabo con “total impunidad”.

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